La Justicia como virtud es la voluntad constante de dar a cada uno lo que le pertenece, es decir que la justicia es la virtud de cumplir y respetar el derecho.
La justicia, viene de “ius” que significa “lo justo”. La justicia es ética, equidad y honradez. Es un valor determinado como bien común dentro de la sociedad, para mantener la armonía entre sus integrantes, por lo que es un conjunto de pautas y criterios que establecen un marco adecuado para las relaciones entre personas e instituciones.
Desde un punto de vista filosófico, el concepto la justicia es una virtud y lo propio de toda virtud y hábito es ser una disposición que nos inclina de un modo firme y permanente en nuestros actos. Es una virtud que reside en la voluntad, es decir, en el apetito racional como indica Santo Tomás de Aquino “no es justo quien conoce lo que es recto sino quien obra rectamente”.
“La justicia es reina y señora de todas las virtudes” - Cicerón
La justicia se representa con una mujer que lleva los ojos vendados, una balanza en una mano y una espada en la otra. Los ojos ciegos o vendados pretenden destacar que la justicia no mira a las personas, sino sus hechos, es decir que la justicia es igual para todos. La balanza representa el juicio que determinará colocando a cada lado de la balanza los argumentos y pruebas. La espada expresa que la justicia castigara con mano dura a los culpables…
El sentido propio de la justicia exige que haya un débito exigible entre personas y que debe ser una personas distinta e independiente la que imparte la justicia o la “injusticia”.
El jurista Ulpiano la definió como “la justicia es la constante y perpetua voluntad de dar a cada uno su derecho”. Los preceptos o mandatos del derecho son: vivir honestamente, no hacer daño a nadie y dar a cada uno lo que le corresponde.
En la doctrina cristiana, la justicia es una las virtudes cardinales, cuya práctica establece que se ha de dar a cada uno lo que le corresponde o pertenece con arreglo a Derecho, razón y equidad respecto a los individuos y al bien común.
En resumen, la justicia es uno de los principios del derecho y necesaria más que tener libertad, paz, tolerancia y democracia.
A lo largo de la historia, encontramos muchos personajes que destacaron en todo momento por su sentido de la justicia, de entre ellos me gustaría hablar de:
Tomás de Aquino, (1225-1274), italiano, fraile, teólogo y filósofo católico perteneciente a la Orden de Predicadores (Dominicos), es considerado el principal representante de la enseñanza escolástica y una de las mayores figuras de la teología sistemática. Su obra en materia de metafísica representa una de las fuentes más citadas del siglo XIII. Fue el principal defensor clásico de la teología natural. Sus obras más conocidas son la Summa theologiae y la Summa contra gentiles. Fue canonizado en 1323 y declarado Doctor de la Iglesia en 1567 y santo patrón de las universidades.
“La ley es la prescripción de la razón, ordenada al bien común, dada por aquel que tiene a su cargo el cuidado de la comunidad”
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