El autocontrol como fortaleza del carácter

“Quién conquista a otro es fuerte, pero quien se conquista a si mismo es poderoso” Lao Tsé.

Hoy desde mi patio de butacas, hablamos de mis observaciones sobre el Autocontrol, como una de las fortalezas del carácter que se encuentran dentro del grupo de la Templanza, entendiendo estas como las fortalezas que nos protegen en contra de los excesos.

El autocontrol es la habilidad de dominar emociones, pensamientos, comportamientos y deseos de sí mismo que cada persona tiene como individuo. El autocontrol es la capacidad que tenemos para ejercer dominio sobre nosotros mismos y esta capacidad nos permite afrontar cada instante de la vida con mayor o menor serenidad y eficacia.

Según los expertos el autocontrol puede mejorarse a través de las actitudes positivas y mediante el control de las emociones y comportamiento. Con estas actitudes reconoceremos fácilmente cuales son los hábitos negativos que tenemos y que hacemos mal y podemos mejorarlo.

El autocontrol es una fortaleza que nos ayuda a lo largo de la vida en nuestras relaciones interpersonales. Daniel Goleman nos enseño con la Inteligencia Emocional que el autocontrol de las emociones es una de las aptitudes que dominan las personas emocionalmente fuertes a través de la empatía.

Para un autocontrol efectivo siempre nos ayuda la meditación y la relajación para pensar, recapacitar y tomar cierta distancia sobre la situación.

El autocontrol nos sirve para:

• Tener mayor claridad de pensamiento y por tanto a la toma de decisiones
• Mejorar nuestra autoestima
• Poder enfrentarnos a situaciones comprometidas
• Facilitarnos las relaciones con los demás
• Concentrarnos en las tareas que realizamos diariamente
• Aumentar nuestro bienestar emocional
• Controlar el estrés de forma positiva

Igual que en el desarrollo de otras habilidades y fortalezas, en el autocontrol también se falla, para retomar la senda del éxito debemos fijarnos objetivos reales y alcanzables por nosotros de forma constante y llevar un autorregistro de aquellas situaciones donde no nos sentimos confortables y así cambiar la conducta inadecuada por la que realmente queremos tener.

Pero no debemos atribuirnos mayor responsabilidad y si fijarnos atentamente en los acontecimientos positivos y negativos y analizar nuestra responsabilidad en ellos, con el fin de reforzarnos a nosotros mismos, mediante frases positivas para potenciar nuestra conducta.

A lo largo de la historia nos encontramos con muchos personajes, que nos han demostrado su fortaleza de carácter a través del autocontrol. Para mí, quizás uno de los más representativos sea:
Mohandas Karamchand Gandhi (1860-1948), fue el dirigente más destacado del Movimiento de Independencia indio contra el Raj británico, para lo que práctico la desobediencia civil no violenta. Recibió de Rabindranath Tagore el nombre honorifico de Mahatma (composición en sánscrito e hindi de Maha “grande” y atma “alma”.

Desde 1919 perteneció abiertamente al frente del movimiento nacionalista indio. Instauró métodos de lucha social novedosos como la huelga de hambre. Encarcelado en varias ocasiones, pronto se convirtió en un héroe nacional, con gran influencia moral sobre el desarrollo de las conversaciones que prepararon la independencia de la India.

Fue asesinado por un fanático integracionista hinduista a la edad de 78 años. Sus cenizas fueron arrojadas al rio Ganges. https://es.wikipedia.org/wiki/Mahatma_Gandhi 

“Cuida tus pensamientos, porque se convertirán en tus palabras. Cuida tus palabras, porque se convertirán en tus actos. Cuida tus actos, porque se convertirán en tus hábitos. Cuida tus hábitos, porque se convertirán en tu destino”  Mahatma Gandhi